24 marzo 2007

Medicinas y evolución

No hace muchos días escuché una entrevista bastante curiosa en Quirks&Quarks, un programa de la radio la canadiense. El tema que trataban era si, desde un punto de vista antropológico y de evolución, la raza humana "estaba yendo" a mejor o a peor.

Desde un punto de vista "evolutivo", los fuertes tienen más probabilidades de sobrevivir mientras que los débiles quedan en el camino. Con esto, la especie debería evolucionar "a mejor" -o al menos mejor adaptada a su entorno-.

Pero en el caso de los humanos esto ha cambiado. Gracias a la medicina, antibióticos y demás, ahora una persona enfermiza/débil puede seguir adelante por lo que "sus genes" pueden pasar a la siguiente generación. Antes, en una epidemia de xxx morían cientos y sólo sobrevivían los más fuertes. Ahora esto no ocurre -al menos en el mundo occidental-.

Pero bueno, ya se sabe. Evolucionamos a mejor? A peor? Yo creo que simplemente evolucionamos "a distinto", y sólo con el tiempo se verá.

2 comentarios:

New Yorker dijo...

Creo que la evidencia es muy fuerte justificando el argumento de que la raza esta EMPEORANDO sin duda. El uso indiscriminado de medicinas/antibioticos/... permite que los genes de los no capaces se perpetuen con el empeoramiento del codigo genetico universal.

No es necesario buscar muy lejos para encontrar ejemplos de ese empeoramiento. Por ejemplo, el numero de personas con alergias/asma/problemas respiratorios/... se ha disparado en los ultimos anhos. Los mas atrevidos culpan de ello a los niveles de contaminacion ambiental que sin embargo son inferiores a los existentes en los 70, 80 y en clara espiral descendente anho a anho.

Este problema tiene como consecuencia la superpoblacion del planeta que es sin duda el mayor problema que la raza humana enfrenta ahora.

Zorro de Segovia dijo...

Piii, error! Durante milenios dominamos el entorno mediante la fuerza física de modo que sobrevivieron los más altos, más fuertes y más aptos para la procreación. Ahora el entorno ha cambiado, ya no exige un esfuerzo físico, sino intelectual. Ahora sobreviven científicos como Einstein, empresarios como Gates, políticos como Putin. El especimen dominante es ahora el inteligente, el despiadado, el competitivo, no ya el físicamente superior.